Se marcha Carrasco, uno de los héroes de la última Liga atlética
El papel del belga fue fundamental para el título conseguido en 2021
Ha marcado 47 goles y ha repartido 35 asistencias en el Atlético
Simeone trató hasta el final de que se quedara, pero fue imposible
Se marcha Carrasco, uno de los héroes de la última Liga atlética. Lo hace por segunda vez, y ahora todo hace indicar que con carácter definitivo. El belga abandona el club para irse en busca de los petrodólares árabes al Al Shabab, que le multiplica su contrato después de que Simeone tratara en vano que la directiva le renovara. Carrasco deja en caja unos 15 millones de euros que serán invertidos en un centrocampista. Con él se va uno de los grandes regateadores puros que quedaban en la Liga española. Otra baja más en la devaluada Primera División de Tebas.
47 goles y 35 asistencias. Ese es el bagaje productivo de Carrasco en el Atlético, club al que llegó en el verano de 2015 con apenas 22 años procedente del Mónaco. Díscolo y anárquico, le costó entrar en los sistemas de Simeone y en la dinámica de vestuario, pero esa misma temporada fue el autor del gol del empate en la final de la Champions disputada ante el Madrid en Milán.
El belga abandonaría el equipo en el mercado de invierno de la temporada 17-18 por motivos que nunca quedaron claros. Se marchó a China, donde permaneció hasta que el club le recuperó en el curso 19-20. Llegó en la segunda vuelta y le costó entrar, justo lo contrario que al año siguiente, cuando fue una pieza clave en el título de Liga 20-21, con seis goles marcados, muchos de ellos decisivos, como el que sirvió para derrotar al Barcelona en el Metropolitano.
En enero de 2023, cuando el Atlético fichó a Memphis Depay, el Barcelona adquirió una opción de 16 millones sobre él que nunca llegó a ejecutar por problemas económicos. Más o menos será lo que pague ahora el Al Shabab, que le arrebata a la afición rojiblanca uno de sus jugadores más queridos. Carrasco no quería abandonar el club, pero la directiva no apostó por él como se lo había pedido su entrenador. Con un contrato que caducaba en junio de 2024 estaba claro que ésta era la última oportunidad de sacar algo por él. Veremos si el dinero compensa su pérdida, porque lo que está claro es que será un hueco difícil de llenar.